Tarde agradablemente intranquila, entrañablemente acompañada,
una improvisación necesaria.
Escuchar 10 veces el mismo: -¿Y nena dónde trabajas?
20 veces: -Hijica cuanto me alegro de pasar la tarde contigo.
30 ese: -¿Y qué se le habrá perdido a tu abuela en la peluquería? Sí que tarda...
Y otras tantas: -No te vayas sóla para casa que está oscuro.
Esas advertencias que sólo escuchas a tu abuelo
y que colocan todas tus preocupaciones en su lugar real en sólo unos minutos....
Salir a la calle
y por primera vez ser realmente consciente
de los que se han ido y ya no verás más
y los que quedan y tienes que absorver hasta el último segundo.
Una mezcla entre arrepentimiento, tristeza y orgullo.
Una parada de autobús, sueño...
Un coche pasa corriendo y me devuelve a la realidad, suena Vetusta Morla,
Sí, que casualidad.....gracias ( pienso para mis adentros, lo necesitaba)
"Cuadrar el círculo de esta obsesión
asumir que rendirse no es una opción......"
¡Cosas de la vida!